Algo que se ve a simple vista en las calles y que hace preguntarte como se puede dar de lado a un problema hasta que te come. O al menos muerde...
Solo en Bucarest se estima (son datos cogidos de otras webs, periódicos, etc..) que hay unos 50.000 perros vagabundos. Mi experiencia es que la gran mayoría no son peligrosos lo más que me ha pasado es algún ladrido. Claro con esto no digo que no pueda pasar nada. De hecho no es raro que en los hospitales traten a gente por mordeduras.
Este problema es derivado de la movilización forzosa de personas del campo a la ciudad provocada por Nicolae Ceausescu en tiempos comunistas para cumplir con sus planes de industrialización y sistematización social. Mucha gente vivía en el campo con la compañía de estos animales, a los cuales luego (muchos) tuvieron que abandonar por la imposibilidad de meterlos en los pisos que se les asignaron.
Las zonas con más densidad de perros son los barrios más pobres, en el centro aunque los que se ven son "pocos", en zonas como en el sector 5 (sur-oeste de la ciudad) se dice que hay autenticas jaurías.
Se hace poco para arreglar este problema, los mandamáses no parecen actuar con fuerza y la gente que dice ama a estos animales protestan contra cualquier solución pero no hacen nada para impedir que mueran en las calles.
Hay intentos de esterilización pero es inútil puesto que es un proceso lento y no hay medios suficientes para hacerlo con más rapidez que la propia procreación. Tampoco se ven defensores que acojan en casa a algún perro, y los rumanos que ves con mascota siempre son perros de pura raza. Por otro lado, muchos vagabundos si que los acogen, sobretodo por el frío invierno que sufre Rumanía todos los años. Donde más de una persona muere por falta de calor.
En toda Europa se ha combatido este problema logrando controlarlo. ¿Por qué en Rumanía no? Pues como todo aquí: ausencia total de responsabilidad. Da igual este problema o una zanja sin señalizar. Aquí cada uno se busca la vida puesto que reclamar no sirve de nada.
El dia 22 de Noviembre de este año pasado el parlamento rumano aprobó la ley que legaliza la eutanasia. Esta ley fue aplazada varias veces por las protestas de los protectores de los animales pero con el visto bueno de Europa se consiguió aprobar. Para la efectividad de este medida cada municipio debe plantear a referéndum la aplicación o no de ella.
Los perros deberán ser recogidos de la calle por cada ayuntamiento, alojados en perreras (que lógicamente no darán a basto por falta de personal, medios, e instalaciones) durante 30 días y si durante este plazo nadie reclama al animal se pueden esterilizar y devolver a la calle o aplicar la eutanasia. Esto no es nuevo, la eutanasia en perros abandonados se aplica en toda Europa (quiero decir, en España por supuesto se hace) y se aplicó en Bucarest entorno al 2001 de la mano del antiguo alcalde bucarestino Traian Basescu. Entorno a 50.000 perros fueron sacrificados entonces pero la presión social e internacional (varios actores hollywoodenses se plantaron como cabeza de cartel en las protestas) consiguió entonces rebajar el numero de animales eliminados hasta que en 2008 se terminó por prohibir la eutanasia.
Quiero hacer notar que no estoy ni a favor ni encontrar de una u otra medida. Sólo sé que este es un gran problema para un país que no es capaz de levantar el vuelo solo y que no tiene medios necesarios para atajar el problema de una manera que guste a todo el mundo. Mientras todo esto pasa, unos pasan de largo y otros, los devotos, defienden a muerte el derecho a ser libre del animal para luego dejarlo morir de hambre o frío en las calles.
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